Me pregunto por qué en tantas ocasiones he tenido la impresión
de que muchas personas ven los videojuegos como algo para adolescentes o
chiquillos que no tienen nada más que hacer, como si fuera algo residual para
matar el tiempo. Posteriormente, recurro a las estadísticas y muchas de ellas
afirman que es común este hobby entre hombres y mujeres hasta los 35 años (¡oh,
dios mío me quedan 3 años y poco! L). En otras se comenta
que, entre los 31 y los 55 años no era ya un hobby común. En cualquier caso, me
sigo preguntando: ¿por qué se arrastra este tópico de asociar videojuegos sólo a jóvenes
adolescentes o niños rata?
Realmente los videojuegos son un arte y no sólo
implican matar marcianos con un mando o un ratón. Hay géneros, hay historias y
para mi es muy parecido al cine, con la ventaja de que puedes interaccionar en
la ficción y obtener pequeños logros o motivaciones. Es un tipo de ocio sano,
social donde puedes conocer gente, y queridos elfos: el entretenimiento es
importante en la vida humana. Necesitamos ratos donde podamos destensar,
desconectar de problemas y divertirnos con el título o los títulos que nos
llaman la atención. Me parece muy bello tener un hobby y poder dedicarle algunas horas.
Por otro lado, tiene sentido que sea un hobby para jóvenes
ya que nos llevan muchas horas y cuando uno se hace mayor
aumentan sus responsabilidades y compromisos. Todo es temporal, evoluciona y tiene su momento cumbre. Esto lo saben especialmente
jugadores de historias que requieran toda nuestra concentración y me viene a la
mente un grande como World of Warcraft. Probablemente, alguien de 40 años no va
a poder destinar 6 horas a jugar al día como un chaval de 20 años puede hacer
en verano si quiere. Es muy subjetivo.
Sin embargo, un hobby no se debería medir por el número de
hora que le echamos. No me imagino una vida sin sacar un espacio para jugar a
lo que me gusta, siempre que el tiempo me lo permita. También debo destacar que
nunca he sido y nunca seré una jugadora que sólo quiera jugar todo el día
porque me saturaría, pero en cualquier tarea que haga. Pero sí que deseo destinar un pedacito de mi tiempo a
alguna partidilla o unas dos o tres horas a la semana. Hay hobbies como el fútbol
que crecen con sus adeptos bien y lo llevarán toda la vida en mayor o menor
medida.En los videojuegos puede suceder lo mismo, ya depende de cada persona y sus tiempos.
Probablemente, los videojuegos tienen una fecha de caducidad
más marcada que otros hobbies porque requiere de habilidades, rapidez, agudeza,
concentración y, con los años todos envejecemos y quizás nos apetezca seguir
con aficiones en las que apenas haya que poner esfuerzos. Esto, lógicamente, es
muy personal pero es una de las razones que personalmente considero que puede
estar relacionado. Aunque, la principal, como señalaba en el párrafo anterior
suele ser la falta de tiempo.
Es verdad que cuando voy a convenciones gaming, la mayoría
del público no tiene más de 25 años (y tirando por lo alto) pero luego, en
menor medida, observo familias, gente más de mi quinta y por tanto, no es el público
objetivo de los videojuegos sólo los más jóvenes.
Mucha gente que asocia videojuegos con adolescentes
desconoce lo que hay detrás de esta pasión. Es normal. Además, no niego que la
mayoría de público sea gente muy joven, pero hay de todo. Cuando desconoces
algo, sueles pensar en los estereotipos típicos. Pero los videojuegos son un
arte, nos causan sentimientos, emociones y es mucho más que matar unos
marcianitos en una pantalla para pasar nuestro rato. Para quienes no lo conozcan,
les diría que es un hobby muy parecido al cine (afición que está mejor valorada
en la sociedad) y con la ventaja de que puedes interaccionar con la historia en
primera persona.
Hay cosas que simplemente no caducan o no deberían.
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