¡Buenos días a todo el mundo! Hacía 5 años que no publicaba nada en este espacio (¡tengo delito!), no tenía ni consola yo en 2017, y hoy me he levantado con ganas de recuperar un poco este lugar y saciar mi pasión por la escritura, no sé bien por qué, pero cuando uno siente que llega el momento de realizar algo lo sabe. Y hoy he sentido eso. Me felicito por ello, porque no estoy en mi mejor momento anímico desde hace varios meses. Puede que esto no me lleve a ningún lado y no sea muy constante a la hora de publicar artículos, no puedo prometer nada en estas circunstancias, pero sí tengo la intención de compartir y plasmar en cierto modo impresiones de esta pasión por los videojuegos y que, ¡ojalá nunca acabe!
Puede que me haya influenciado la noticia del posible fin de Twitter (sueno a broma pero algo me ha movido porque para los tímidos/as como yo tener espacio escrito en Internet es importante), porque quien me conoce sabe que soy una twitera activa, entonces necesito buscar un nuevo hogar donde compartir visiones, opiniones y sentimientos sobre mi pasión por los videojuegos y por la escritura. Ahora que parece que se va a truncar mi "sueño" de ser una influencer en la única red donde yo (alguien tan insignificante como creo ser, pero eso es otro tema con el que estoy trabajando) he conseguido un poquito de visibilidad. Y mi objetivo en redes siempre ha sido un poco el de mostrar ese lado de mi que son los videojuegos o el anime.
En fin, perdonen los párrafos (como dirían en la red social de Twiter esto sería "mucho texto") pero hoy me he animado en verdad a escribir un poco más, sin limites de caracteres tipicos en redes sociales, sólo por compartir los sentimientos que surgen cuando se lanza un videojuego nuevo al que le tenemos ganas en menor o mayor grado y que el hype aumenta según se acercan el día del lanzamiento, como hemos experimentado a lo largo de esta semana muchos de nosotros.
Estoy refiriéndome a Pokémon Púrpura y Pokémon Escarlata ,alías "Pokémon Españita". Pedazo de videojuego que tenemos muchos de nosotros en nuestros manos desde el día de ayer. Sólo por saber que está basado en España, Paldea, estoy segura que muchos jugadores españoles lo van a comprar porque siempre gusta ver cercanía y reconocer cosas que conocemos, y encima tenemos a los adorables pokémon envueltos en una nueva historia de esta entrañable saga y con mecánicas muy divertidas, y un gatito verde hermoso llamado Sprigatito, que obviamente no se le puede decir que no, al igual que los otros dos pokémon iniciales (Fuecoco y Quaxly) que me parecen preciosos. Una vez más han creado un producto atractivo donde sabemos que tarde o temprano muchos de nosotros vamos a caer en la tentación como debe de ser. Puede que haya jugadores, fans de Pokémon de toda la vida, decepcionados porque esperan mejores gráficos, algo que después de tantos años en el mercado, cuesta más conseguir el perdón, y también hay que entenderlo.
Ya habrá momento de leer análisis o hacer hincapié en esos otros aspectos, pero me quedo con lo más importante para mi que es la ilusión, las ganas y el impulso de querer que llegue el día del lanzamiento, ¿cuántos de vosotros estáis ansiosos la noche anterior al lanzamiento o preocupados porque llegue ese mismo día el juego en formato físico, y cuanta pasión se comparte y se transmite entre todos los pokéfans que están sintiendo las mismas cosas creando una atmósfera maravillosa? Es realmente extraordinario y nos aúna a todos esa pasión contagiosa.
Son esos nervios en la tienda para recoger el juego temprano porque sabes que ya está ahí, o para que venga el mensajero por la mañana, y hasta para solicitar el día libre en tu empresa porque uno merece regalarse días donde pueda disfrutar de su juego sin compromisos que tanto nos ahogan a veces en la vida y nos impiden disfrutar más tiempo de las cosas que realmente nos mueven (y que necesitamos para estar bien en gran medida). Es la misma sensación cuando venían los Reyes Mayos de niños y que sigue presente después en la vida adulta, manifestándose en todo lo que amamos, esa es la chispa que todos queremos sentir y que nos da viveza, nos ayuda a vivir y aguantar mejor el día porque sabemos que se acerca el momento donde nos vamos a seguir protagonistas de un juego que nos necesita, ¡y nosotros a él!
Esa motivación, esas ganas, el olor a juego nuevo de la cajita , el cartucho pequeñito que por primera vez ponemos en la consola y ver que 20 amigos tuyos de la consola están en línea también jugándolo y sintiendo cosas parecidas a ti, tener entre tus manos el juego como si fuera tu bebé cuando lo recoges y pensar "¡ya lo tengo por fin!" y compartirlo en redes sociales porque estamos felices. No podemos olvidar hacer mención a los primeros minutos sumergiéndonos en el juego para empezar una aventura, conocer y poder participar activamente en escenarios que meses anteriores nos han enseñado en vídeo y fotos. ¿Sabéis lo increíble que es poder sentir todo eso? Sólo por sentir esa felicidad, mil millones de gracias a los creadores del juego, que consiguen movernos porque queremos tener bajo el mando, una nueva historia con personajes que tenemos ya mucho cariño, explorar y volver a encontrarnos con los pokémon con quienes ya tenemos un vínculo, y podemos compartir nuevas aventuras, o revivir sus puntos fuertes y su jugabilidad que han acompañado a una persona toda su vida, así como conocer nuevas mecánicas o historias para romper con la monotonía.
Chapó por hacernos creer en la magia.
Prontito escribiré más impresiones del videojuego, prometo no tardar 5 años en hacerlo.
Gracias por leerme.
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